Vivir buscando el Norte, esa es mi lucha personal. El norte como horizonte, el norte como infinito, como respiro, como suspiro. El norte como sueño...
jueves, octubre 22, 2009
REGRESO A L´ALGUER.
Regresamos a Alguero con la única intención de poder visitar las cuevas de Neptuno. El primer día que fuimos fue imposible porque el mar estaba más que alborotado, así que volvimos con ese único objetivo.
Aprovechamos para comer en un restaurante junto a la muralla y ponernos las botas, una vez más, con el helado italiano que no tiene desperdicio por su cremosidad y su sabor intenso. Por tercera vez consecutiva, Ardorin, se quedó con ganas de probar el de chocolate que andaba siempre agotado en todas las heladerías(mirar que cara de enfado tiene en la foto), pero no se podía hacer nada porque lo poco que quedaba sólo daba para uno y siempre ponía una etiqueta: "Lorena".
Risas generales porque Pedro es tan fino y se toma tanto tiempo para degustar un helado, que termina por derretírsele, armando la marimorena.
La muralla bordeando el mar.
Esta señora que veis en la foto, se dedica a recoger y cuidar gatos abandonados. Esta tarea le cuesta 300 euros mensuales. Entiendo sus buenas intenciones, sin duda tiene un gran corazón y ama a los animales, pero les está haciendo un flaco favor, a ellos y al entorno. No es bueno alimentarles de este modo. De hecho, no dejan de traer nuevas criaturas al mundo. No pude evitar pensar en el gato del farero, una historia que narra Miguel Delibes de Castro en su libro: "La Naturaleza en Peligro". Ediciones Destino. 2005, que os recomiendo ya de paso. Ahí podreis leer la historia, pero resumiéndola mucho, narra lo que sucedió cuando un farero a quien le gustaban los pájaros y también los gatos, fue destinado a vivir en una pequeña isla de Nueva Zelanda. Se llevó al gato que hizo desaparecer un pájaro que sólo habitaba esa isla.
Para terminar, esta foto en la que salgo medio resignada porque casi me cargo la maleta por empeñarme en sacar las postales para dárselas en mano a la señora cartera, tenía a mi Pedro contento...
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3 comentarios:
Jajajaj...pero que egoista! Pobre Ardorín....haberle dado un poquito de helado de chocolate (yo hoy mientras veo gran hermano me pienso comer uno de chocolate, platano y nueces...jejeje). Que salís todos guapísimos pero los ojazos de Ardorina llaman la atención! Bueno...que voy a seguir con GH que ha terminado la publi.
Hasta mañana
Yo casi como más helado en invierno que en verano...
Soy así de raro...
Marisol: ¿Qué es eso de que me usas para llenar los tiempos muertos de las publicidades?, jajajaja...
Nada de compasión con Ardorín, que a él le da igual blanco que negro(en cuestión de helados digo). Besets.
Acróbata: Pues ya somos dos raros, también cojeo del mismo pie, es lo que hay...
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